Todo se convertirá en cizaña (II)

(Viene de aquí)

Mucho podría decir de las reflexiones que este pequeño dibujo me suscita: ¿dónde ha quedado el estudio de la Filosofía, como la ciencia de la búsqueda de la verdad profunda, el arte de hacerse preguntas y el valor de buscar respuestas que respondan al fin último de la humanidad?

En Filosofía entendemos que si negamos una ley natural, cualquier aberración puede tornarse ley. Y hoy, la humanidad está negando la ley natural… la única ley es la dictada por cualquier presidente o parlamento elegido legítimamente… con toda la arbitrariedad que ello encierra… ¿Hay en nuestra naturaleza de personas humanas, diferente de la naturaleza animal, principios elementales, básicos, fundamentales que nos induzcan hacia un desarrollo cada vez más humano? Si el proceso de evolución continúa, como afirma la ciencia, ¿hacia dónde, hacia qué tipo de persona humana estamos evolucionando? ¿Es la racionalidad la que impera en nosotros o el instinto de supervivencia?

Y por ahí entramos en cuestiones de la ética cuyo fundamento es la dignidad humana hoy fuertemente cuestionada por estas ideologías nazis que sólo reconocen la dignidad de aquellos que responden a las expectativas de un cierto grupo. Para ellos, la dignidad no es inherente a la persona humana, sino que depende del origen (raza, país, religión…) o del comportamiento (narcotráfico, drogadictos, identidad sexual…) criterios arbitrarios porque… ¿por qué perseguir los narcotraficantes y no perseguir los traficantes de personas y de armas?

Para no seguir con más cuestiones filosóficas, que es la base de una conducta reflexionada que humanice, quiero recordar aquí la frase de Mahatma Gandhi: “Ojo por ojo… y ¡el mundo se quedará ciego!” y, sobre todo, aquella de Jesús: “el que esté libre de pecado, que tire la primera piedra”.

Efectivamente, como responde el padre a su hija con mucha sabiduría, queriendo eliminar la cizaña que vive junto con el trigo… todo se convertirá en cizaña.

Pilar de la Puerta, FI

-Mozambique-