El pasado 23 de septiembre celebramos, en la comunidad de Nazareth – Valladolid el cumpleaños de Mercedes Nuevo, cien años de vida. Y de ellos, ochenta, de seguimiento a Jesús en la Congregación, por medio de la educación de adolescentes y jóvenes. Ochenta años repartidos en distintas comunidades, aunque los recuerdos más profundos, quizá también por más cercanos, los tiene de Almería, recuerdo y cariño que son recíprocos.
El día entero fue de acción de gracias por todo lo que Dios ha realizado en ella, en su largo caminar. Esta acción de gracias continua tuvo sus lugares y momentos más significativos:
Todos los sobrinos disfrutaron con ella, y ella con todos. Se despidieron hasta el año que viene, si Dios quiere. Algunos tendrán oportunidad de verla antes, otros, no, pues viven lejos. De todos modos, la alegría vivida hoy les servirá para reforzar los lazos familiares con el pasado y el presente de la familia, y esto siempre ayuda a vivir en unión con todos.
Nuestro deseo, al terminar este día, es que Dios siga pasando por la vida de Mercedes, y por la de todos los que hemos compartido con ella retazos de esta vida, y se vaya haciendo realidad un mundo más humano, más justo, más fraterno.
Mª Rosario Samaniego