Alborada 23-10-2018, Silvia Rozas
23 octubre, 2018
Sínodo: con ojos de mujer (III-B)
23 octubre, 2018

Sínodo: con ojos de mujer (III-A)

(Leer II-B)

Esta crónica comienza el pasado sábado 13, ya anuncié que el fin de semana tenía un programa denso …por la mañana tuvimos grupo y por la tarde la agenda ya señalaba descanso. A la salida un encuentro muy gozoso con mis antiguas compañeras,  ahora directoras de las escuelas de FyA en Italia, Milán, Génova y Roma; están pensando en la formación a los profesores y pudimos dialogar sobre diversas posibilidades según necesidades y deseos.

Luego nos fuimos a la iglesia de San Ignacio para acompañar a Vitangelo Denora sj, -responsable de dichas escuelas- en sus últimos votos en la Compañía de Jesús;  participamos en la eucaristía unidas a otras muchísimas personas ya que Vitangelo tiene una larga historia de haber pasado por muchos lugares, siempre dedicado a la educación. Luego en el Colegio Romano, fundado por San Ignacio en 1551, seguimos compartiendo cena y música. Una experiencia muy bonita y entrañable. Fue él quien dio mi nombre para participar en el Sínodo.

Las coordinadoras se quedaron esa noche en Roma para acudir el domingo a la canonización.  Hubo que madrugar mucho pero mereció la pena. La multitud ya a las 7.30 era inmensa y parecía imposible llegar a una silla,  pero por fin me encontré sentada pronto y la espera me sirvió para pasar por el corazón los lugares de la vida y muerte de Romero porque tuve el regalo de conocer El Salvador hace años y participar en la eucaristía en la misma capilla del hospitalito donde fue asesinado.  También su tumba en la catedral. Igualmente fueron pasando muchos rostros de vosotros y vosotras que os hubiera gustado estar; os sentí a mi lado.

Fueron llegando muchas personas y pronto me vi rodeada de salvadoreños/as que a lo largo de la ceremonia se emocionaron hasta las lágrimas y me contagiaron… el tiempo se me hizo corto, no hacíamos caso del reloj, estábamos siendo testigos de un hecho largamente esperado y parecía que lo imposible se hacía real.

Al cruzar la plaza para ir a mi lugar me crucé con Alberto Ares sj, ¡qué casualidad! Y a pesar de su prisa porque iba a concelebrar, nos hicimos una foto que consideramos histórica. Por la tarde pude pasear disfrutando la temperatura estupenda y buscando lugares menos llenos de gente, cosa bastante difícil pero posible… descanso total para acometer la siguiente semana que ha sido muy fuerte.

El ritmo de trabajo ha estado marcado por las intervenciones en las asambleas plenarias sobre la III parte del Instrumentum Laboris,  –ELEGIR: caminos de conversión pastoral y misionera– es lo más pesado porque escuchar tantas lenguas, desde contextos muy diversos y mundiales, es rico pero tantas horas a lo largo del día resulta cansado. Después en los tiempos libres siempre hay encuentros de otro ritmo y color que son muy enriquecedores también.

Pero ya hemos vuelto a los grupos por lenguas y se van concretando las propuestas post-sinodales que queremos sean de fácil y real aplicación pastoral en todos los ambientes. Da gusto ese trabajo amasado por miradas y experiencias tan diversas de la iglesia, el intercambio es muy enriquecedor; esperamos darle cauce y que sirva para más vida.

(Leer III-B)

María Luisa Berzosa, FI – desde Roma

@BerzosaML