El Papa a los sin techo: «Tenemos que formar una Iglesia pobre para los pobres»

A una semana de la clausura del Jubileo de la Misericordia, el Papa recibió el viernes a unas 6.000 personas sin techo procedentes de 22 países, incluido España. La peregrinación fue organizada por la asociación Fratello (“hermano”) y por la Comunidad de San Egidio, y culminó en el día de la fiesta de san Martín de Tours, que dio la mitad de su capa a un mendigo.

Tras escuchar los testimonios de varios de ellos en el Aula Pablo, Francisco habló del significado de palabras como pobreza o dignidad. Hay una pobreza, les dijo, que significa perder «la capacidad de soñar». «El sueño de un pobre, de alguien que no tiene techo, ¿cómo será?», se preguntó. «No sé, pero sueñen. Y sueñen que un día podrían venir a Roma, y el sueño se realizó. Sueñen que el mundo se puede cambiar, y esa es una siembra que nace del corazón de ustedes». «Y esto es lo primero que les quería decir: enséñennos a todos los que tenemos techo, porque no nos falta la comida o la medicina, enséñennos a no estar satisfechos. Con sus sueños, enséñennos a soñar desde el Evangelio, donde están ustedes, desde el corazón del Evangelio».

Pero pobreza no es lo mismo que miseria, matizó. «Pobre sí, esclavo no. La pobreza está en el corazón del Evangelio para ser vivida. La esclavitud no está para ser vivida en el Evangelio sino para ser liberada».

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