“Es el momento de acoger la llamada a ser en la Iglesia “la familia de la Madre Cándida” en las dos vocaciones distintas: la vida religiosa consagrada y la vida cristiana laica, profundizando en su sentido y considerando el alcance y las consecuencias de esta llamada. Se intuye un nuevo horizonte para la integración Hijas de Jesús-Laicos. Debemos discernir y secundar la acción del Espíritu”
(Determinación CG XVII)
Queridos todos,
hoy 31 de mayo en nuestros colegios estamos de fiesta. El motivo: la celebración del nacimiento de la M. Cándida. Esta fecha no solo alumbra su vida, sino que con ella nace en la Iglesia un carisma que mantiene su fuerza y su vitalidad, y se sigue desplegando y enriqueciendo.
El 31 es “fiesta de familia”, de la familia de la M. Cándida, fiesta y fecha compartida. Ella nos convoca a laicos/as y a religiosas que nos sentimos invitados a vivir nuestra vocación cristiana en los acentos de su carisma.
¡Felicidades a cada uno y cada una!!! Deseo en este día:
Y, para terminar, compartir con vosotros un párrafo del libro de “Doble Vertiente”, de Anunciación Febrero, donde se narra el capítulo del nacimiento de Juanitatxo y la experiencia de su padre- Aita:
“La abuela la ha acercado a su padre y retira los pliegues del chal. En la carita redonda y rojiza, los ojos se abren y cierran con rapidez; todavía no se han acostumbrado a la luz. A modo de caricia, el hombre pasa sus gruesos dedos por los mofletillos de su hija y dice entre divertido y tierno: ¡Qué pequeña es!
Qué pequeña…No se puede decir más de ella.
Pero Dios es buen amigo de la pequeñez”
Así nacemos en pequeñez, pero no lo olvidemos, Dios es buen amigo de la pequeñez. Un abrazo para cada uno y cada una, ¡FELIZ DÍA!!!
Raquel Amigot
Delegada de Obras Educativas Provincia España-Italia