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PERLA ESCONDIDA EN LA CARTA Nº 442

Carta nº 442      Enero 1912

 

“… lo que debemos hacer es vivir preparadas para cuando Dios nos llame”

 

Hoy es uno de esos días especiales que la vida te presenta de vez en cuando. Hoy iniciamos un nuevo mes y, a la vez, estamos en vísperas de celebrar un gran día: 2 de abril. Y hoy resuenan los ecos de un fin de semana intenso: en Valladolid, se ha celebrado el 150 aniversario de aquel 2 de abril de 1869. Pero ¿qué pasó ese día hace 150 años? Busca, empápate, conoce y prepara una visita al Colegio de Jesuitinas de Valladolid. Primero llama para poder visitar una capilla especial que encierra un tesoro sencillo.

Y hoy, también, la Madre Cándida se hace presente con una de esas frases que todos sabemos y que muchos olvidamos, porque muchas veces preguntamos sobre lo que tenemos que hacer, otras veces nos interrogamos a nosotros mismos sobre esta misma cuestión, y es hoy cuando encontramos respuesta a este interrogante. Y esa respuesta viene dada en palabras sencillas y diáfanas: vivir preparadas para cuando Dios nos llame, vivir cada día como si fuese el último e ir atesorando buenos días.

Hoy, como tantos días, me siento delante del ordenador con un particular agradecimiento a Dios por haber podido vivir de dos formas diferentes lo celebrado en Antequera y Valladolid. En Antequera con un grupo llamado “Senderismo Jesuitinas”, con unas personas de una categoría especial y liderados por un excelente maestro y mejor persona: Joaquín Soto. Tiene la virtud de vivir y sentir lo que habla y tiene el don de darle un toque de trascendencia que nos acerca a Dios desde la naturaleza. Y en Valladolid gracias a las redes sociales y gracias una “familia” que ha rezado y ha compartido su sentimiento de este fin de semana allí. Os comparto algunas pinceladas de Valladolid que pedí:

“…sentimos que son nuestra familia, llenas de amor, paz, esperanza… unos sentimientos por los que merece la pena haber hecho tantos kilómetros para estar aquí, ojalá pudiéramos transmitiros todo lo vivido en el Rosarillo. No perdamos nuestra alegría, sencillez, nuestra esencia, nuestro carisma como la M. Cándida nos enseñó”

 

“El Rosarillo hoy me ha hablado de agradecimiento por lo mucho que el Señor me ha regalado de la mano de tantos rostros y nombres a la Congregación y a mi Colegio. Dicen que toda aventura comienza con una llamada, y los ecos del “sí” que siguió a esa llamada me hablan de mucha Vida. El “sí” de la M. Cándida se derrama en forma de agradecimiento y vida también hoy».

 

«Ha resonado mucho en mí, con intensa autenticidad, ese “con Dios todo lo puedo” que atraviesa la Historia hasta mi propia vida”

 

 “El sentimiento del día es de agradecimiento puro por un Rosarillo que en mi vida significó la calma plena de que la vida esta para ofrecerla a otros. Me quedo con pensar que la M. Cándida es faro con la luz de Dios, y ahí, cuando visualizo el Rosarillo, la plenitud de luz llena el alma”

 

“Una inspiración, un toque al corazón que ante el Rosarillo ayer una vez más nos interpela a la Familia M. Cándida, una provocación para salir con ellos al mundo y hacer de él el hogar soñado por Dios. Un don y a la vez un reto de nuestra familia.”

 

Dios nos llama todos los días a ser buenos e incluso “nos deja libres, también para equivocarnos, porque al crearnos nos ha hecho el gran regalo de la libertad” (Para Francisco), como nos contaba Lucas ayer con la parábola del Padre bueno.

Seamos libres, seamos buenos, y vivamos preparados para cuando Dios nos llame. Y seamos agradecidos, por eso mil gracias a todos los que me han enviado su comentario. GRACIAS

Antonio Grau

Murcia

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