Entrevista con Mª Luisa Berzosa, FI: ojos de mujer después del Sínodo (y III)

Viene de aquí

Otra preguntas que me haces es cómo crees que debe influir el Sínodo en la manera en que las Hijas de Jesús hacemos pastoral con los jóvenes. En los ratos en que pude hablar con los jóvenes de manera más informal, me di cuenta de que tenemos que cambiar radicalmente nuestra manera de hacer pastoral juvenil y vocacional. Estamos cerca de ellos, pero con esquemas que no sé si llegan. Vuelvo al lenguaje tecnológico, donde ellos están. Esto nos exige mucha preparación. Ya no vale decir que no nos enteramos, ¡tenemos que aprender a enterarnos! Hace poco puse un tweet de algo que escuché en el Sínodo y que hice mío: estar en las Redes hoy no es opcional. No se puede elegir si lo que quieres es estar con los jóvenes. Tenemos que cambiar muchos esquemas. Hay un tema generacional que es que no entienden algunos lenguajes en temas de liturgia, etc. Modos de comunicar que ya no les llegan

Me preguntas si nuestro carisma, el de Madre Cándida, tiene algo que aportar a los jóvenes de hoy o si, por el contrario, ya se ha quedado anticuado. ¡Absolutamente sí tiene algo que aportar! Los jóvenes y niños fueron la prioridad de Cándida María de Jesús y lo son ahora para nosotras. Pero, para mí, ser educadora es también cambiar. Pero no el cambio por el cambio, sino intuyendo qué métodos puedo utilizar para que los mensajes les lleguen. Es cierto que hay muchos jóvenes alejados que no quieren saber nada, pero hay otros que quieren y no terminan de encontrar sitio. Hay que mostrarles el rostro amable y la alegría, como decía Santa Cándida, la acogida, la sencillez.

Hoy acompañar a los jóvenes tiene mucho que ver con “perder tiempo”, estar, escuchar y ser empáticos. Eso nos piden. Nuestro carisma está vivo y tiene buenos destinatarios. Hay que encontrar los puentes para hacerles llegar los mensajes.

Me pides que imagine qué tweet sobre los jóvenes y el Sínodo pondría Cándida María si hoy tuviera Redes Sociales. Yo creo que diría: “Poneos a la escucha de los jóvenes de HOY, no de los que fueron”. Remarcando bien el “hoy”.

Muchas gracias por este rato compartido. Ya me sueno repetitiva, pero me alegro de compartir con vosotras lo que he vivido.

Equipo de Ayuda para la Comunicación