Primera plenaria de la Secretaría para la Comunicación; Francisco invita a un «gran juego de equipo» para responder a los nuevos desafíos «sin miedo y sin imaginar escenarios apocalípticos»
La reforma de los medios de comunicación vaticanos es una reforma «irreversible», que no sirve solo para darle una “manita de gato a las cosas”, sino que debe hacerse con «inteligencia, con mansedumbre», pero, «permítanme la palabra», con «un poco de violencia buena». Lo dijo el Papa al recibir a la Secretaría para la Comunicación, guidada por monseñor Dario Viganò, cuya asamblea plenaria se está llevando a cabo en estos días. Francisco, que subrayó, entre otras cosas, que “L’Osservatore Romano” «deberá encontrar una modalidad nueva y diferente, para poder llegar a un número mayor de lectores superior al que logra llegar con su formato en papel». El Papa recordó que la Radio Vaticana no ha dejado de utilizar las ondas cortas, que son preciosas para países que no cuentan con nuevas tecnologías, como en África, e invitó a todos a un «gran juego de equipo para responder mejor a los nuevos desafíos comunicativos que la cultura hoy nos exige, sin miedos y sin imaginar escenarios apocalípticos».
«Este dicasterio, que cumple 2 años el próximo 27 de junio (dos velas) se presenta en plena reforma», dijo Jorge Mario Bergoglio. «Y no debemos tener miedo de esta palabra. Reforma no es “pintar” un poco las cosas: reforma es dar otra forma a las cosas, organizarlas de otra manera. Y se debe hacer con inteligencia, con mansedumbre, pero también (permítanme la palabra) con un poco de “violencia”, ¡pero de la buena, para reformar las cosas! En este caso, de hecho, no se trata de una coordinación o de una fusión de precedentes dicasterios, sino de construir una verdadera institución “ex novo”», prosiguió el Papa citando el “Motu proprio” con el que fue instituido el dicasterio.