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…navidad… NAVIDAD!

Distintas y diversas maneras de sentir, vivir y celebrar NAVIDAD.

He sentido y vivido NAVIDAD con Graziella y su “bebecito” de mes y medio: Josué.

Y la celebro compartiendo  mi alegría…”os anuncio un gran gozo”,  en ambiente navideño familiar.

Graziella, 34 años, ha surcado hace poco el Atlántico para llegar a España. Allá, en Guatemala, ha dejado cuatro hijos, con su hermana, para poder encontrar un futuro mejor para ellos. También para escapar  de la violencia física de su pareja.

Es que además sus cicatrices, viejas ya, delatan una infancia apaleada y maltratada.

Entre tanto llanto contenido y alegría de poder estrechar a Josué en su corazón me cuenta cómo ha combatido por mantener su embarazo, por mantener la vida que Dios ha puesto en su seno.

Sola absolutamente, sin papeles reglados, sin recursos… todos la abocaban al aborto.

Mujer de fe, lágrimas y oración en su relato, sólo le pedía a Dios que su hijo fuera “varoncito”. Ella, mujer, ha sufrido tanto…

Acude a MATERNITY que le anima y ayuda. Y me toca en suerte ser su madrina.

Nace el bebé, y le pone por nombre JOSUÉ!

Me comenta que es muy pretendido el nombre, Josué: “salvación de Dios”.

… y a mí, me va resonando por dentro:”…le pondrás por nombre JESÚS…”

Mantengo en mis brazos a Josué, tan pequeño, tan vulnerable, tan “como uno de tantos…, como un hombre cualquiera…”  que dirá Pablo en Filipenses.

Es bastante fácil contemplar y admirar aquello que dice Juan: “…tanto amó Dios al mundo que entregó a su Hijo”

Meciendo a Josué, yo también tengo ganas de cantar:

“Gloria a Dios en las alturas! Y en la tierra PAZ a los hombres que Dios quiere…”  tanto.

Teresa Zugazabeitia F.I.